El principal templo religioso de la ciudad albergaba en su interior una imponente custodia de plata sobredorada, joya de la corona.
A su diestra una enorme escalera de caracol permitía ascender hacia el campanario donde el tañir de campanas anuncia una nueva celebración religiosa.
La vuelta a un aula fue esta vez para contemplar la zona donde Don Antonio Machado enseñó su francés a los baezanos. Más tarde nos acogió el palacio de Jabalquinto con su formidable fachada, única en su estilo en la comarca.
ÚBEDA: Fácilmente reconocible para los granadinos una enorme puerta basada en las líneas de la puerta del Perdón de Granada, con ciertos símbolos renacentistas, daba entrada al templo funerario del Salvador que Don Francisco de los Cobos mandó construir para su muerte. Lejos de parecerse al resto de costrucciones dedicadas al uso funerario, el gigantesco templo albergaba en su interior un inmenso altar en forma circular, símbolo de la perfección en el cristianismo, con cientos de detalles alusivos al evangelio.
Luego, un lugar de profundo sentido para un cristiano fue lo que visitamos: la celda en donde murió San Juan de La Cruz, la iglesia y el museo dedicados en su honor.
- Vílchez Iglesia, Alejandro - 4ºC
- Navarro Gómez, Iván - 4ºC
No hay comentarios:
Publicar un comentario