1-El esquiador está a punto de descender. Esta preparado pero a la vez,se nota que está nervioso, pues le tiembla la mano.¡Allá va! Está describiendo unas curvas, las cuales no puedo ver, porque sólo veo cómo se aleja. Tiene un problema. Un alud le va persiguiendo a una velocidad inmensa. Ha llegado abajo pero el alud se lo ha tragado, junto a mi compañero, que también estaba viendo este descenso.
2-No se ve muy bien al esquiador. Está muy alto y lejos. Se ha tirado. Desde aquí veo cómo describe unas curvas espectaculares, mientras esquiva rocas y árboles. Un momento, ¡qué veo! Al esquiador le persigue un gran alud. Se acerca, pero el esquiador no se da cuenta, pues el sonido del viento ensordecedor lo impide. Esta aquí. Le indico que se quite pero no me escucha. ¡¡¡¡El alud nos engulle!!!!!
3-Estoy preparado. Esta sensación es insoportable. Me tiemblan las manos. Creo que estoy preparado. ¡Voy a bajar! Voy más rápido de lo que pensaba. Si hago buenas curvas seguro que impresiono a la gente, y además esquivaré rocas y árboles. El ruido del viento helador me destroza los oídos. Tengo el cuerpo congelado. Ya veo la meta. Me están esperando. Me recuerda a la primera vez que hice esto. ¿Qué me esta indicando? ¿Que mire detrás? ¡¡¡¡Aaah!!!!
Ramón Sáez Barrales 2A
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