La realidad lingüística de España y del español: o la buena salud de la que goza nuestra lengua

En nuestra materia de Lengua castellana y literatura, en 4º de ESO B, reivindicamos el valor de las lenguas, impuestas o no, como el mejor aliado para la comunicación y el buen entendimiento entre pensamientos distintos. Hemos aprendido que las lenguas no entiende de política ni de ideología. Es más, están por encima de ellas. También sobrepasan las fronteras y los dominios geográficos. Nuestra lengua, el español, ha cruzado el charco y ha vuelto impregnada de otras realidades. Debe prevalecer en los hablantes de español el orgullo de hablar una lengua milenaria, en expansión, con prestigio internacional en materia de economía, industria y cultura. Debemos recordar lo afortunados que somos al poder leer directamente a Cervantes, García Márquez, Góngora, Lope de Vega, Cortázar, Borges, Bolaño, Laforet, Gabriela Mistral y tantos y tantas. Y los habitantes de España somos doblemente afortunados, ya que vivimos en un país que reconoce hasta cuatro lenguas oficiales en su Constitución. Sí, cuatro oficiales. No hay muchos estados que puedan presumir de esto. Pero es que, además, se hablaron otras de las que ya solo quedan algunos restos. Incluso encontramos hablas híbridas en zonas fronterizas aisladas, y existen fenómenos tan curiosos como el llanito y el sefardí, que es una auténtica reliquia del castellano del siglo XV. El alumnado de 4º ESO B ha investigado sobre todo esto y hemos hecho un mural digital donde hemos intentado recoger la realidad lingüística de España y del español. Y este es el resultado. Espero que os guste.